OPINIÓN: Viendo está película observé y no creo que yo fuera el único, una semejanza con La guerra de los mundos y El día de mañana, pero está en versión mediocre, aún que en lo de columpiarse con los efectos especiales no se queda atrás. Eso sí, esta incorpora, y me gusta porque es una variedad en cuanto a las otras, la disputa de quién debe viajar en la máquina que los salvará y quien no, habiendo siempre el lado del q
ue sueña con un final feliz, y aquella visión odiosa del que sólo mira por el interés económico. A La guerra de los mundos me recuerda por la escasa unión familiar entre el padre (John Cusack en esta y Tom Cruise en la otra) con sus hijos, y de cómo mientras el miedo y los desastres los persiguen, la unión crece. Aunque obviamente, en la de Cruise hay unos invasores, y en esta el fin del mundo viene dado por unba alineación planetaria. Sobre mi comparación con El día de mañana la diferencia es que en la primera los desastres vienen precedidos por nuestro maltrato a la madre Naturaleza, pero ese desasosiego, y ese instinto de protección son siempre el mismo en las tres películas.
Por cierto, y se me olvidaba -¿dónde tendré yo la cabeza?- una variante más sobre esta cinta es la del periódista loco, al que por otra parte no le falta razón, cuya interpretación hace en la película el efecto de hacerla más verosimil.
NOTA: 6