sábado, 21 de agosto de 2010

J. F. K. Caso abierto



Tengo que reconocer que me daba pereza verme esta película (basada en hechos reales), pero ha sido ponerla, y desde el primer momento, saber que me iba a gustar tanto que la contaría como una de mis favoritas de hoy en adelante.

Dura cerca de tres horas, sino más, pero es que últimamente estoy despistado, y en alto grado. Sin embargo no se hace larga ni aburrida. Y dan ganas de abrazar a Oliver Stone por documentar tan bien tal historia, y a Kevin Costner por dar verosimilitud a su personaje. Por explicar tan bien cómo Kennedy, y no me caben dudas ahora, fue asesinado. No por un hombre, sino por toda un grupo que dio un golpe de estado encubierto.


SINOPSIS: Recreación del asesinato del presidente de los Estados Unidos John Fitzgerald Kennedy a raiz de las investigaciones del fiscal de Nueva Orleans Jim Garison, el único que presentó cargos contra alguna persona por el magnicidio. Garrison, que entrevistó a numerosos testigos de Dallas y personas relacionadas con los hechos, mantuvo la tesis de que hubo una conspiración para asesinar al presidente, en la que podrían haber intervenido el FBI, la CIA y el propio vicepresidente Lindon B. Johnson. (FILMAFFINITY).

OPINIÓN: Buea historia narrada con pulso. No se hace larga ni aburre, aún contando con su minuciosidad, que a mi me llevó a despistarme con la gran cantidad de nombres. Aún así se hace placentera de ver. A mi sobretodo me encanta el discurso que Jim Garrison da al final de la película, imaginando que su esfuerzo seguramente no sirva de nada. Pero manteniendose erguido, optimista. Si, porque lucha por su país. Del mismo modo que lo hizo cuando era piloto de aviones durante la guerra.

Premios concedidos:

1991: 2 Oscars: Mejor fotografía, montaje. 8 nominaciones
1991: Globo de Oro: Mejor director (Oliver Stone). 4 nominaciones
1991: 2 BAFTA: Mejor sonido, montaje. 4 nominaciones




Lo curioso es que esta mañana misma me he terminado de leer "El cerebro de Kennedy" y en ella Mankell, uno de mis autores predilectos, habla del cerebro desaparecido del presidente. Organo robado tras una uptosia rápida y llena de irregularidades.

Pues si, el mundo actual se basa en mentir para ocultar verdades garrafales. Menos mal, que siempre habrá obstinados rastreadores de la verdad.

Saludos.

Nos vemos en lo cines.